"Leer significa arriesgarse mucho"
Para realizar esta consigna, se pidió leer el material de Cristina Pizarro publicado en su texto "En la lectura del lector infinito. Una nueva estética de la literatura infantil en la formación docente" Editorial Lugar Buenos Aires Argentina. Luego de una lectura a conciencia de este, se debía leer un segundo material, "La Maquinaria Literaria" de Carolina Cuesta. El objetivo de las lecturas era relacionar los conceptos en un escrito de una carilla.
En el primer material, la autora define objetos, acciones y sujetos que aparecen en la literatura: el lector, el texto, leer, el lenguaje y la escritura. A medida que se lee, cuenta como estos se relacionan entre sí.
El lector hace que su vida sea aquello que fuera su sueño, encuentra en los textos una forma de salvarse, de no estar solo, de abrirse a nuevos mundos, reales o no (usando la imaginación), haciendo el tiempo infinito.
La escritura, donde el autor pone en juego sus lecturas previas, creando un patrón de significados a partir del repertorio intertextual del lenguaje. Con la suma de textos ya leídos, constituye el propio.
El lenguaje, lo plantea como aquello que define al hombre, su identidad, su historia.
Es un viajero que va de boca en boca, de contexto en contexto. Esto genera sentidos ajenos y una propia percepción de la palabra a lo largo del tiempo.
Es un viajero que va de boca en boca, de contexto en contexto. Esto genera sentidos ajenos y una propia percepción de la palabra a lo largo del tiempo.
La autora define leer como el despertar, salir de uno mismo y sentir terror; es aquello que deja vulnerable nuestra identidad.
Por último, el texto es el que produce un efecto que sólo es posible actualizar en el proceso de lectura. El efecto estético requiere la participación del lector. La obra literaria posee dos polos; el polo artístico describe el texto creado por el autor. El polo estético es la concreción realizada por el lector. La obra cobra vida en la concreción, necesita que se lea.
Donde convergen el lector y el texto, es el lugar de la obra literaria y tiene un carácter virtual, que establece la condición del efecto entre lo dicho y lo pretendido.
Donde convergen el lector y el texto, es el lugar de la obra literaria y tiene un carácter virtual, que establece la condición del efecto entre lo dicho y lo pretendido.
Del segundo material, "La Maquinaria Literaria", se debía leer el texto "Lo real vs lo irreal. Niveles de ficción", que abordaba la ficción en la literatura, como se percibe lo rea e irreal y los niveles de ficción. Al finalizar su lectura debíamos relacionar todo con el primer material
El escrito que realicé, sobre lo leído de los materiales fue el siguiente:
La ficción es la invención de la literatura, es la forma en que cada texto literario presenta su forma de representar la realidad, aunque esto también puede ser relativo, ya que depende de lo que percibe el lector como real o irreal y del tiempo.
Existen distintos niveles de ficción donde se ponen en juego lo de real e irreal; ésto dentro del texto se denomina “relatos enmarcados”. A su vez, los relatos enmarcados se dividen en dos: relato marco, contiene el otro relato y el relato enmarcado, que se desarrolla dentro del marco. Cada vez se complejiza más, impidiendo o complicando la distinción de estos niveles.
Cada texto literario tiene su propia forma de construir la ficción, una manera particular de mostrar la realidad.
En este juego influye el lenguaje, el cómo se cuenta, y a partir de qué género se realizará. Para lograr esto, se debe observar la escritura y la invención del autor, el cual utilizará sus texto de lectura previa para crear una secuencia de significados. Así, al leer un texto literario, nos encontramos con una pluralidad de los mismos. Este texto genera un efecto que se va actualizando en el proceso de lectura; por ello es necesario la participación del lector.
El polo estético de la obra literaria se da cuando se genera la concreción por el lector, esto da vida a la obra.
Otro polo que posee la obra literaria es el artístico, el cual describe el texto creado por el autor. El lenguaje que se emplea tiene su propio contexto temporal, tiene su propia percepción. A través de las palabras que se empleen, los lectores pueden armar una imagen en su cabeza de cómo es este autor, lo que no quiere decir que sea cierta. Si el autor escribe relatos tristes no quiere decir que sea triste.
El autor decide cómo mostrarse al mundo, los verosímiles sugieren esta imagen. No siempre se puede afirmar que el que habla en la obra es el autor; casi siempre todos los elementos son inventados, incluyendo la la voz que relata. A veces, los narradores son parte de la ficción, que también posee características propias en cada texto literario.
¿Por qué elegí este trabajo como evidencia?
Esta actividad fue una de las primeras de la materia; considero fue la más importante para poder abordar los siguientes trabajos prácticos. En él se encuentran los conceptos de ficción y como conforma los texto literarios; el rol del lector y cómo el autor pone en juego sus lecturas previas para lograr un significado en el texto y permitir o ayudar al lector a comenzar a escribir.
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